Descomunal encuentro. Partido completísimo de River y penoso lo de Atlanta. Se dio la lógica, esa que muchas veces desaparece en este deporte, pero que hoy no se hizo esquiva. Un recién ascendido contra un GIGANTE descendido. Y el equipo de Almeyda se hizo cargo, como ameritaba la situación. Desde que la pelota dio el primer giro, el conjunto millonario fue protagonista, amo y señor. Todo lo que venia padeciendo, se lo pudo volcar al bohemio. Le presiono las salidas constantemente, abrió la cancha cuando correspondía, usaron las bandas hasta el cansancio, y lustraron sus botines. Repasando las diferentes lineas, cabe destacar que la defensa no sufrió sobresaltos, estuvieron ordenados, los centrales firmes, y los laterales fueron salida constante para Chichizola. En el mediocampo, Cirigliano manejo los hilos, como suele pedirle Almeyda y se noto la vuelta del "pelado" Aguirre, cumpliendo su polifuncionalidad a la perfección, llego al gol, dio asistencia y recupero varias pelotas. Otro que volvió sin haberse ido fue el "tractorcito" Sanchez, quien supo aprovechar las dimensiones del Nuevo Gasometro. Ocampos paso de promesa a realidad, aún con varias cuestiones por pulir, es una de las claves de este equipo. Andres Ríos supo bien como hacer para que no se note la ausencia de "Chori" Dominguez, pidiendo la pelota constantemente y siendo el nexo entre las diferentes lineas y teniendo buenos encuentros con la máxima figura del partido:
Fernando Cavenaghi. El capitán millonario estuvo imparable y quedo demostrado en el resultado final (7-1) de los cuales 3 goles fueron suyos, en el primero genero la jugada, y en el 6to su generosidad fue extrema y le dio la posiblidad a Bordagaray de meter su primer gol con la banda riverplatense. Si no se hace mansión al equipo de "Vitrola" Ghiso no es por mi fanatismo por River, sino porque prácticamente no existió dentro del campo de juego. Le costo muchísimo poder generar alguna situación de gol o avanzar en el terreno. El DT hizo cambios queriendo darle combate a los de Nuñez pero se hizo imposible, porque desde el vestuario ya eran menos que su rival. Ante semejante situación el técnico millonario opto por darle mas minutos de juego a Mauro Diaz, Facundo Affranchino y Bordagaray.
Claramente fue el mejor partido en mucho tiempo de River. Algunos dirán que por la talla del rival, no se podia dar de otra manera, pero vale destacar que el bohemio no es menos que Dep.Merlo, con quien River no pudo obtener diferencias.
Lo que queda de este partido son todos puntos altos y la tranquilidad del deber cumplido. Manteniendo la punta y el invicto, ya se piensa en el Domingo, enfrentar a un Huracán que no la esta pasando bien, pero que puede dar pelea.
Gracias por leerme, sera hasta la próxima.
TC
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